Ayer, las puertas del Cine-Teatro Municipal volvieron a abrirse al público en un emotivo acto de reapertura que marcó un hito en la vida cultural y social de nuestro municipio. El evento congregó a casi 400 personas con ganas de conocer el nuevo estado de este lugar.
El alcalde de la localidad, Alberto Lara, destacó durante su intervención que uno de los principales objetivos que se marcó al inicio de su mandato fue precisamente la recuperación de este emblemático espacio. “El Cine-Teatro Municipal es el epicentro de nuestra cultura y de nuestra vida social. Hoy celebramos mucho más que una obra finalizada: celebramos el regreso de un lugar que nos pertenece a todos”, afirmó.
Lara agradeció a la Diputación por su implicación directa en el proyecto, especialmente por asumir su responsabilidad tras los hechos ocurridos en 2023 y por aportar la financiación necesaria para que la restauración fuese una realidad. Asimismo, tuvo palabras de reconocimiento para la empresa encargada de la ejecución de las obras, por su esfuerzo e implicación, así como para los trabajadores municipales por su gran dedicación durante este tiempo.
La reapertura fue acompañada de un programa artístico a la altura de la ocasión. El conocido profesor Rafael Gómez ofreció un monólogo escrito por su hijo, Franz Gómez, una pieza cargada de emoción que ofreció una magistral descripción de lo que fue, es y representa el Cine-Teatro para Pedro Muñoz.
La música también fue protagonista de la velada. La Banda Municipal de Música deleitó al público con la interpretación de diferentes obras cargadas de simbolismo como el pasodoble “Suspiros de España”, un recuerdo de los orígenes de la Banda, o “Una noche en La Mancha”, del compositor local Petronilo Serrano, como homenaje a la fuerza y permanencia de este colectivo musical. Además, a la Banda se unió el coro de la Escuela Municipal de Música, interpretando una obra que simboliza el futuro de la cultura en el municipio.
El acto concluyó con la interpretación del Himno de Pedro Muñoz, envolviendo de emoción a todos los presentes y sellando así una jornada que ya forma parte de la historia local.
Con esta reapertura, Pedro Muñoz recupera un espacio esencial para el arte, la cultura y la identidad de su gente.