Carlos Ortiz, alcalde la localidad, y María Victoria Garay, como concejal de Educación, visitan el CEIP Juan de Ávila para presenciar la instalación de un aparato desfibrilador en el centro, acción que se está llevando a cabo en los demás colegios de la localidad: Ntra. Sra. De los Ángeles, Hospitalillo y Mª Luisa Cañas.
“La presencia de un aparato desfibrilador en espacios escolares es de vital importancia, pues por aquí pasan centenares de alumnos y alumnas, profesorado y otros trabajadores/as y hay que prevenir lo máximo posible ante un problema tan grave como lo es una parada cardíaca fuera del ámbito hospitalario. Aunque lo mejor es que este aparato, realmente, nunca tenga que ser utilizado”, explica Ortiz.
Gracias a la Diputación de Ciudad Real y a la campaña “Salva un corazón, salva una vida”, la iniciativa de contar con desfibriladores en los centros escolares pedroteños se ha hecho posible. Una iniciativa innovadora con la que se dota de mejores condiciones a los centros, pudiendo actuar precozmente, algo esencial para revertir la situación de parada, pues el tiempo es vital para una persona que lo sufre.
