Gracias a la aportación económica de las empresas que aparecen en el cartel junto a dos empresarios anónimos ha sido posible traer de vuelta nuestro querido nacimiento de luces.
Además, «Casa Rosita» ha donado el gran árbol que se encuentra en el Centro Cívico, Carmen Martínez Reillo ha colaborado aportando una preciosa estrella a la puerta de la Iglesia y, por último, un anónimo ha hecho posible que la Calle Sancho Panza luzca preciosa gracias a sus luces.