El alcalde de Pedro Muñoz, José Juan Fernández, ha dictaminado que el inmueble que contiene la antigua Fábrica de Harinas, se encuentra en estado de “ruina inminente” y ha pedido a los propietarios del mismo que presenten un proyecto de demolición de los edificios contiguos para, posteriormente, proceder a la rehabilitación de la parte que contiene la maquinaria antigua de dicha fábrica, catalogada como elemento de arqueología industrial único en la comarca.
Con el fin de garantizar la seguridad pública y la integridad del patrimonio
El alcalde de Pedro Muñoz, José Juan Fernández, ha dictaminado que el inmueble que contiene la antigua Fábrica de Harinas, se encuentra en estado de “ruina inminente” y ha pedido a los propietarios del mismo que presenten un proyecto de demolición de los edificios contiguos para, posteriormente, proceder a la rehabilitación de la parte que contiene la maquinaria antigua de dicha fábrica, catalogada como elemento de arqueología industrial único en la comarca.
José Juan Fernández explicaba que “el objetivo principal es garantizar la seguridad pública y preservar la integridad del patrimonio, por ello, desde el Ayuntamiento y tal y como contempla la Ley, se han dispuesto todas las medidas precisas para proteger adecuadamente el patrimonio y, sobre todo, asegurar la integridad física de las personas y vehículos que transiten por la zona, medidas que pasan por la demolición de los edificios contiguos a la Fábrica de Harinas para posteriormente poder rehabilitar la zona protegida”.
En este sentido, el Ayuntamiento ya ha establecido un perímetro de seguridad con el fin de prevenir y evitar daños a las personas y a los bienes públicos “ya que el derrumbe podría ocasionar graves consecuencias”.
Del mismo modo, el alcalde ha requerido a los propietarios del inmueble citado que en un plazo de quince días, presenten el proyecto de demolición, ya que en caso contrario, será el Ayuntamiento quien lo ejecute.
José Juan Fernández indicaba que ya en febrero de 2010, se elaboró un informe técnico municipal aconsejando la rehabilitación del edificio sito en la Avenida Juan Carlos I, y tras una segunda visita girada por el técnico municipal en junio de este año, se vio la posibilidad de demoler los edificios colindantes para rehabilitar el edificio que contiene la fábrica de harinas, “una actuación con la que se solucionarán todos los problemas y pondrá punto y final a un culebrón que comenzó hace varios años”.